La caza se reivindica como potenciadora de la vida rural

//La caza se reivindica como potenciadora de la vida rural

elcorreodeburgos.com/ M. M.

Foto – S. O.

Más de medio millar de personas de toda edad defendieron ayer su práctica frente al MEH, «ya que es una actividad legal, fiel a la tradición y a los pueblos»

Apoyar la práctica de la caza y de la tradición rural que hay tras ella, además de pedir «que cesen los insultos y ataques que sus defensores reciben» -para lo que pedirán a las administraciones mayor dureza normativa al respecto-, fueron algunas de las razones que llevaron a más de medio millar de personas de toda edad a concentrarse ayer junto al Museo de la Evolución (MEH). «Y es que la caza es la base de numerosas actividades que mueven la economía rural, y que ayudan a nuestros pueblos a conservar su gente y evitar la despoblación», defendía ayer el presidente de la Federación de Caza y Pesca de Castilla y León, Santiago Iturmendi.

Agradeció a los presentes que acudieran a la concentración que, bajo el lema ‘Sí a la caza, nuestra forma de vida’, se celebró ayer al mediodía en Burgos al igual que en otras 40 provincias españolas, y entre quienes se encontraban representantes de agrupaciones agrarias y ganaderas. «Así como de asociaciones de caza y muchas otras vinculadas al mundo animal llegadas de todos los puntos de la provincia, como Perro Perdiguero de Burgos o la Asociación de Aficionados al toro bravo», comentó, «además de representantes del PP, partido que nos ha mostrado su apoyo», añadió.

«Pero también muchos otros que han venido a título personal incluso en familia, porque es una cita en la que se defiende y se representa a la caza pero sobre todo al mundo rural y las tradiciones de éste, entre las que se halla la caza», defendió.

Y es que, como reiteró Iturmendi, «la caza es más que una afición, es una actividad que genera muchos recursos que ayudan al mundo rural en algunos casos incluso a sobrevivir». Remarcó que en todo el país, el número de cazadores supera el millón de personas, «a los que se suma todo el mundo rural, con lo que suponemos en conjunto más de 5 millones de personas vinculadas de una u otra manera al mundo de la caza», argumentó.

Volumen de población que, como explicó, «creo que merecemos ser valorados, pues con todo el respeto y el cariño para la gente de ciudad, no somos ni más ni menos que los habitantes del ámbito urbano, y queremos que se nos tenga tan en cuenta como al resto». En el caso de Castilla y León, Iturmendi detalló que son más de 100.000 cazadores, «de los que más de 15.000 pertenecen a la provincia burgalesa», concretó.

Durante su discurso de bienvenida a todos los presentes, el responsable regional del sector recibió una contundente negativa general tras preguntar en voz alta a los presentes «si debemos permitir que personas que se mueven por políticas populistas basadas en criterios sectarios, nos digan cómo cuidar a los mejores colaboradores que tenemos en nuestra labor de ayuda al mundo rural, como son nuestros animales».

Asimismo, recalcó con contundencia la intención del gremio de «seguir peleando en los juzgados todas las veces que haga falta, contra las críticas injustas que estos radicales vierten sobre todo en las redes sociales», denunció. «Porque es ahí donde debemos defender nuestra afición por la caza como práctica legal, reglada y generadora de riqueza que es tanto para la sociedad en general como para el mundo rural en particular, y no caer en las provocaciones de estos grupos».

Iturmendi pidió así a los cientos de personas allí presentes que obviaran las posibles provocaciones que pudieran llegar desde el otro lado del río, donde a la misma hora las asociaciones en defensa de los animales y contra la práctica de la caza, habían convocado también otra manifestación.

Uno de quienes acudió ayer a la cita en apoyo de la caza fue Richard Barrenechea, miembro de una cuadrilla de jabalí de Medina de Pomar y criador de perros, quien reiteró las «injustas» críticas que se vierten sobre la caza. «A nadie le interesa más que a nosotros que todo sea legal y acorde a la normativa que cuida de los animales y del medio ambiente, y así lo hacemos». Explica cómo a menudo «somos nosotros quienes alertamos del peligro de presencia de animales en las carreteras o del abandono de montes y bosques, pues la caza depende y convive directamente con del mundo rural y sus gentes», comenta.

Amante de la naturaleza y la caza desde niño, confiesa habérselo transmitido a su hijo Román, que con 7 años le acompañaba ayer en el MEH. El pequeño confesaba su amor por los perros «que ya me hacen tanto caso como a papá», al ser habitual que le acompañe en sus paseos por el bosque con los perros que crían. «Me gusta mucho cuidarlos y cuidar el monte», comentó el niño, ante la mirada de su padre, quien aseguró que «de eso se trata, aprender a respetar el mundo rural e inculcárselo a los que vienen detrás».

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2018-04-16T14:01:25+02:00 16 abril, 2018|Actualidad cinegética|