Media veda con inicio irregular

//Media veda con inicio irregular

diariodeleon.es/ MIGUEL ÁNGEL TRANCA | LEÓN

Foto-  SECUNDINO PÉREZ –

La primera jornada depara resultados dispares aunque mejor de los esperados en algunas zonas como las de Cistierna y Puente Almuhey La sequía condiciona.

Resultados irregulares según la zona aunque mejor de lo esperado dada la situación en los campos por la pertinaz sequía marcaron la primera jornada de media veda en la provincia de León que ayer se abría y que se extenderá hasta el 17 de septiembre.

No pintaban buenos augurios para esta campaña para los cientos de cazadores que desempolvaban sus escopetas (en León el número de licencias supera por poco las 15.000). La ausencia de lluvias y un escenario seco no ayudaba a que los ejemplares de codorniz, la pieza más apreciada en esta media veda, fueran los esperados. Con mejores condiciones y algo más de agua el panorama hubiera sido mejor. Esa circunstancia evitó que un buen número de cazadores saliera. Y eso que era festivo. Pero los que lo hicieron lograron en algunos casos dar con el premio. Siete, ocho y hasta nueve piezas de codorniz fue el premio a una mañana de madrugar o en su caso a una tarde para los que no quisieron hacerlo un poco más adversa. En zonas como la de Cistierna y Puente Almuhey el panorama, lejos de mejorar a los años precedentes, no distó mucho del pasado año, que por cierto tampoco fue de los que se recuerdan de manera positiva para los amantes de la caza y en este caso de la media veda.

Sin un excesivo número de codorniz la dificultad para dar con ella y acertar fue mayor aunque en algunos casos los más madrugadores tuvieron un día aceptable llegando a las ocho. Eso sí, en todos los sitios no fue igual en una provincia que por suerte no vivió un escenario tan adverso como en buena parte del resto de Castilla y León.

Por delante queda un mes para que los cazadores intenten salvar la media veda en cuanto a unos resultados que si bien ayer fueron desiguales aunque no tan adversos como los esperados lejos de mejorar se espera que vayan incluso a peor conforme transcurran las jornadas. Martes, jueves, sábado y domingo de cada semana son los días hábiles con un número máximo de 30 piezas por jornada para cada cazador, algo que ni de lejos se espera que se alcance hasta el 17 de septiembre cuando codorniz, paloma torcaz o tórtola (en este caso con seis piezas como máximo) ya no se puedan cazar.

Precisamente en estas dos últimas especies de aves la media veda para su caza empezará dentro de una semana, el 22 de agosto.

En la primera con la perdiz como protagonista los cazadores pudieron disfrutar de su pasión. Lo hicieron varios centenares aunque se espera que de cara al fin de semana sean muchos más los que salgan con sus perros y escopetas en busca de unas piezas que se cobran escasas, menos de las que desean, y también con una mayor dificultad. A menor número las opciones de dar con ellas son menores algo que quedó constatado ayer en una jornada irregular en la que si bien en algunos escenarios se lograba dar con ellas en otros, incluso no muy lejanos, dar con esta gallinácea se convertía en un reto bastante exigente y a veces complicado.

Eso sí, a pesar de esa situación marcada en cierta medida por la sequía que ha afectado al campo leonés y por extensión a aves como la codorniz para su reproducción, los cazadores no dejarán pasar la oportunidad para intentar a lo largo del poco más de un mes de la media veda demostrar que su pasión es incluso superior a las dificultades que entraña dar con las piezas a lo largo y ancho de la provincia leonesa.

diariodeleon.es

2017-08-16T14:04:41+02:00 16 agosto, 2017|Actualidad cinegética|