Que te deseen la muerte, la de tus hijos, la de tus padres, la de tu pareja… que injurien y calumnien, que te amenacen a ti, y a los tuyos, es intolerable. Esto es lo que sufrimos los cazadores y las cazadoras constantemente y mientras tanto la sociedad callada y la justicia dándonos la espalda.
Nuestro colectivo no es menos que cualquier otro y sin embargo está tratado como si lo fuera. El artículo 510 del código penal, que “regula conjuntamente y amplía el ámbito de los delitos de provocación a la discriminación, al odio y a la violencia”, no nos ampara y todos los ataques de odio hacia nosotros quedan impunes.
¿No se supone que estamos en una sociedad tolerante, diversa y respetuosa? ¿O eso sólo es para algunos? Instagram censura caza pero permite discursos de odio hacia los cazadores. Basta de callar, basta de agachar la cabeza, basta de sufrir.
Basta ya.